¿necesito pedir?
"Tú no puedes adquirir, así que lucha y pelea." —St 4:2
Nuestras guerras internacionales y conflictos personales se deben, en parte, al hecho de que incluso nuestras necesidades legítimas a veces no se cumplen a pesar de que el Señor ha prometido proveer todas nuestras necesidades, "nuestro pan de cada día" (Mt 6:11). Esto se debe a que Su promesa es frecuentemente condicional a las peticiones que le hacemos en nuestras oraciones.
El Señor dice en su palabra: "Usted no obtiene porque no pide" (St 4:2). Esta afirmación nos puede confundir, porque recordamos haberle pedido al Señor que satisfaga ciertas necesidades que no vemos satisfechas. Sin embargo, para conseguir lo que necesitamos, no sólo debemos pedir verbalmente sino sin egoísmo (St 4:3). La oración egoísta nos deja muy necesitados y en polémica.
Somos egoístas por naturaleza, y por lo tanto nos encontramos atrapados privados de nuestras necesidades. La única manera de tener un corazón generoso es conseguir un corazón nuevo (ver Ez 36,26), y Jesús es el único que nos puede dar un corazón nuevo y una vida nueva. Por lo tanto, sin Jesús, no podemos hacer nada (Jn 15,5). No podemos orar correctamente o evitar luchar. Nuestra necesidad sobre todas las necesidades es el amor total por Jesús.
Oración: Padre, te doy gracias por proporcionar mi necesidad, Jesús.
Promesa: "Oh Dios, escucha mi oración; escuchad las palabras de mi boca. Ya que hombres arrogantes se han levantado contra mí, y hombres violentos buscan mi vida; no ponen a Dios delante de sus ojos. He aquí, Dios es mi Salvador; el Señor sostiene mi vida " —Sal 54:4-6.
Alabanza: "Bendeciré tu nombre, oh Señor, por tu bondad" (Sal 54:8). Me regocijo en tu amor, Señor Jesús resucitado.
Rescripto: †Muy Reverendo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 22 de junio de 2012
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