"hay un lugar para nosotros"
"¿Acaso yo puedo hacer las veces de Dios?" (Génesis 50:19).
José es un "tipo" de Jesús, es decir, una figura del Antiguo Testamento cuya vida anuncia la venida futura del Señor. En un sentido, José "tomó el lugar de Dios" al mostrar perdón hacia los que le volvieron la espalda (ver Gn 50:19). José no sólo perdonó a los que le hicieron daño, sino que les aseguró en repetidas ocasiones e incluso, les proveyó el resto de sus vidas.
En un sentido, nosotros también podemos tomar el lugar de Dios. Como discípulos de Jesús, imitamos al Señor en su carácter y su ministerio. Somos llamados a mostrar el amor, la misericordia, el perdón, el cuidado y la provisión de Dios a un mundo que no Lo conoce. Mucha gente no tiene idea de cuánto Dios les ama y desea perdonarles. No saben cuán ansiosamente el Señor Jesús anhela tener una comunión íntima con ellos (ver Lc 22:15). Somos "embajadores de Cristo" (2 Co 5:20) y tomamos su lugar en la tierra.
Un embajador toma el lugar de los líderes de su nación, representándolos en una nación extranjera. Como hijos de Dios y miembros de su familia, estamos representando al Señor a la gente de este mundo. Permite que el Señor brille por medio de ti para convencer a la gente de su amor y perdón incondicionales. Jesús se ha ido antes que nosotros para prepararnos un lugar (Jn 14:2); vayamos y "hagamos las veces de Dios" (Gn 50:19) en este mundo que necesita tan desesperadamente conocer su perdón, misericordia y amor.
Oración: Padre, como santa Teresa de Ávila enseñó, tú no tienes manos, sólo las nuestras. Te ofrezco mi vida, manos, sonrisa, amor y corazón indulgente.
Promesa: "No teman a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. Teman más bien a aquel que puede arrojar el alma y el cuerpo a la Gehena" (Mt 10:28).
Alabanza: San Benito fue bendecido al morir frente al altar apenas recibió al Señor en la Eucaristía.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 10 de febrero de 2015
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.