el portavoz del padre
"Digo lo que el Padre me enseñó" (Juan 8:28).
Jesús dijo solamente lo que el Padre le enseñó (Jn 8:28). Jesús pasó mucho tiempo aprendiendo de Su Padre. Se levantaba temprano para escuchar a Su Padre (Mc 1:35), permanecía despierto hasta muy tarde para estar con Él (Lc 6:12), y pasó cuarenta días en el desierto para escuchar los planes de Su Padre para Su ministerio público (Mt 4:1ss). Jesús solamente nos contó lo que escuchaba de Su Padre (Jn 8:26). De hecho, Jesús mencionó que "el Padre que me ha enviado me ordenó lo que debía decir y anunciar" (Jn 12:49).
Como discípulos de Jesucristo, nosotros Lo imitamos en todo lo que hace. Como Jesús pasaba mucho tiempo escuchando al Padre, nosotros también lo hacemos así. El Padre nos enseñará lo que tenemos que decir (Jn 8:28). Arraigados en Jesús, nosotros escucharemos cada palabra que habla Dios (Jn 8:47). El Padre nos asegura, como aseguró a Moisés: "yo te asistiré siempre que hables y te indicaré lo que debes decir" (Ex 4:12). El Padre promete: "Yo pongo mis palabras en tu boca" (Jer 1:9).
Dios frecuentemente habla con una voz suave (1 Re 19:12ss). Vivimos en un mundo donde demasiadas voces ahogan la voz de Dios. Apaga o tira a la basura el televisor. Apaga la radio, tu celular inteligente, tablet, o computador. Levántate temprano, quédate despierto hasta tarde, y haga lo que sea para escuchar con atención al Padre. Vive "de toda palabra que sale de la boca de Dios" (Mt 4:4). Escucha al Padre. Habla Sus palabras.
Oración: Padre, escucharé lo que Tu proclamas (Sal 85:9). Dame "un oído atento" (Sal 40:7) y "una lengua de discípulo" para hablar Tus palabras proféticas (Is 50:4).
Promesa: "Porque si no creen que Yo Soy, morirán en sus pecados" (Jn 8:24).
Alabanza: Pablo visita a los presos y los anima a aceptar a Jesús y ser libres.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 10 de noviembre de 2015.
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