la ecología dela misión
"Por el camino..." (Mateo 10:7).
Todos somos misioneros por la virtud de nuestros bautismos. Es muy importante que cada uno de nosotros cumpla con la misión para con el Seňor. Para hacer esto, tenemos que saber y respetar la ecología de la misión.
Nuestras misiones son las sanaciones, los milagros y las salvaciones (Mt 10:8). Estos obras del poder de Dios, por supuesto, no deben ser separados de la proclamación del reino de Dios (Mt 10:7). Además, no tendremos el poder de la misión si no hemos escogido la pobreza de la misión (Mt 10:9-10). También, no podremos alcanzar el mundo con el evangelio hasta que no alcancemos y bendigamos los hogares (Mt 10:12). La evangelización del mundo está basada en el hogar. Además, nuestras misiones se detendrán o se desviarán si no nos sacudimos el polvo (ver Mt 10:14) del rechazo, la falta de perdón, el resentimiento, el desánimo y la amargura. Las misiones se llevan a cabo entre verdaderas tormentas de dolores, malos entendidos y quebrantos. Debemos aceptar la gracia de Dios para "sacudírnoslas" o nuestras misiones serán imposibles.
Todos los cristianos, es decir, los misioneros, tienen que ser ambientalistas y ecologistas espirituales. Demos nuestras vidas totalmente a Dios. Hagámoslo todo a la manera de Dios y nuestras misiones se llevaran a cabo.
Oración: Jesús, con amor y obediencia, iré a hacer discípulos de todas las naciones. (Mt 28:19).
Promesa: "Yo los atraía con lazos humanos, con ataduras de amor; era para ellos como los que alzan a una criatura contra sus mejillas" (Os 11:4).
Alabanza: Sandra perseveró por medio del rechazo y el desaliento para encontrar la reconciliación y el perdón en Jesús.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 18 de febrero de 2016.
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