confidencial
"Es Cristo el que nos da esta seguridad delante de Dios" (2Corintios 3:4).
La iglesia de Corinto, fundada por Pablo, puso en duda su habilidad para dirigir el Ministerio (2Co 2:16, 3:6). Pero Pablo tenía una "gran" (2 Co 3:4) y "total" (2Co 3:12; 5:8) confianza (2 Co 5:6). Él no confiaba en sus propias capacidades, sino "en Dios" (2Co 3:4). Así recibió esta confianza "a través de Cristo" (2Co 3:4).
"Por quien nos atrevemos a acercarnos a Dios con toda confianza, mediante la fe en Él" (Ef 3:12). La confianza de Pablo en Dios, a través de Cristo, fue tal que soportó trabajos, encarcelamientos, palizas, afirmando: "con frecuencia estuve al borde de la muerte" y otros sufrimientos sin mencionar (2Co 11:23ss). Pablo tenía tanta confianza que incluso dio su vida por Jesús y fue martirizado.
Como todos los padres, nuestro Padre celestial quiere que sus hijos tengan confianza en su amor y se sientan seguros, sabiendo que pueden confiar en Él. La confianza no sólo nos beneficia personalmente, sino que también agrada a nuestro Padre. Por lo tanto, debemos orar para alcanzar esa gran confianza. Esta oración será respondida mediante una relación más profunda con Jesús y una mayor disposición a recibir el poder de confirmación del Espíritu Santo.
Oración: Padre, dame tal confianza que toda persona que yo encuentre sienta el desafío de confiar en ti más profundamente.
Promesa: "Les aseguro que no desaparecerá ni una i ni una coma de la Ley, antes que desaparezcan el cielo y la tierra, hasta que todo se realice…" (Mt 5:18).
Alabanza: Como un niño, Sandra presenta todos sus temores, ansiedades, decepciones y fracasos a su Padre celestial. Ella siempre experimenta la paz de Dios en esas ocasiones.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 1 de marzo de 2013
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