el evangelio completo
"¡Consideren la situación en la que se encuentran! Ustedes han sembrado mucho, pero han cosechado poco" (Ageo 1:5-6).
¿Has trabajado duro pero obtenido poco de ello, excepto por un sentimiento de descontento? ¿Has comido, comprado o consumido mucho, pero "no se han saciado"? (Ag 1:6) ¿Te has auto estimulado mediante la bebida, las distracciones, pecados sexuales, deportes o entretenimiento, pero "no se han saciado"? (Ag 1:6) ¿Tienes una sensación de vacío y pérdida?
Podemos estar vacíos por muchas razones. Una razón común es que hemos colocado nuestros asuntos antes que los de Dios (Ag 1:2-4) y por lo tanto hemos cometido idolatría. "Porque el culto de los ídolos sin nombre es principio, causa y fin de todo mal" (Sab 14:27). Cuando vamos detrás de ídolos vanos, nos volvemos vacíos a nosotros mismos (Jer 2:5).
Si quieres estar lleno en vez de estar vacío, niégate a ti mismo (Lc 9:23) y entrega tu vida a Jesús, en quien reside la plenitud absoluta (Col 1:19). Ten hambre y sed de justicia, y serás saciado (Mt 5:6). Busca primero el reino de Dios, no el tuyo, "y todo lo demás se les dará por añadidura" (Mt 6:33). "Hagan todo lo que Él les diga" (Jn 2:5). Entonces en respuesta a tu obediencia, Jesús te llenara con el mejor vino (Jn 2:10) del Espíritu (Hch 2:4). Jesús se vació a sí mismo (Fil 2:7) para darnos vida en abundancia (Jn 10:10). Entrega tu vida a Él.
Oración: Padre, me vacío de mí por amor a Ti. Lléname.
Promesa: "Porque el Señor tiene predilección por su pueblo y corona con el triunfo a los humildes" (Sal 149:4).
Alabanza: San Lorenzo y sus compañeros difundieron el evangelio en las Filipinas, Formosa y Japón.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 15 de mayo de 2017.
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