todo o nada
"Un hombre corrió hacia él y, arrodillándose, le preguntó: 'Maestro Bueno, ¿Qué debo hacer para heredar la Vida eterna?' " (Marcos 10:17).
El joven rico fue educado por buenos padres temerosos de Dios. Había guardado todos los mandamientos desde su juventud (Mc 10:20). Solo necesitaba hacer una cosa más. Pero tenía que hacer eso, o nunca entraría en el reino de Dios. "Jesús lo miró con amor y le dijo: 'Solo te falta una cosa. Ve, vende lo que tienes y dalo a los pobres; así tendrás un tesoro en el cielo. Después, ven y sígueme'. Él al oír estas palabras, se entristeció y se fue apenado, porque poseía muchos bienes" (Mc 10:21-22).
El joven aparentemente se perdió el reino de Dios aunque fue muy bueno e hizo todo excepto una cosa. Su único pecado fue que no lo dio todo. Los discípulos "se asombraron aún más, y se preguntaban unos a otros: Entonces, ¿Quién podrá salvarse?" (Mc 10:26)
Sí, la vida cristiana es darlo todo; 99% no es suficiente. Cuesta todo comprar la preciosa perla del reino de Dios (Mt 13:46). El primero y más básico mandamiento es: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu" (Lc 10:27).
El Jesús crucificado lo dio todo. ¿Podemos dar menos?
Oración: Jesús, gracias por tomar todo de mí.
Promesa: "Bendito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, que en Su gran misericordia, nos hizo renacer" (1 Pe 1:3).
Alabanza: Andrés dejó su trabajo y su novia para responder al llamado de Dios al sacerdocio.
Rescripto: †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 11 de octubre de 2017.
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.