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Jueves, 21 de junio de 2018

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san Luis Gonzaga


Eclesiástico 48:1-14
Salmos 97:1-7
Mateo 6:7-15

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"lo mejor que he hecho en toda mi vida es..."

"Cuando Elías fue llevado en un torbellino, Eliseo quedó lleno de su espíritu. En su vida, hizo prodigios y en su muerte, realizó obras admirables" (Eclesiástico 48:12-14).

Elías humilló la economía de Israel deteniendo la lluvia por tres años y medio (Eclo 48:2-3). "Hizo caer tres veces fuego de lo alto" (Eclo 48:3). Cortó las gargantas de varios cientos de falsos profetas (1 Re 18:19, 40). "Él despertó a un hombre de la muerte" (Eclo 48:5). Fue "arrebatado en un torbellino de fuego por un carro con caballos de fuego" (Eclo 48:9). Sin embargo, estas no fueron las mayores cosas que Elías hizo. Su mayor obra fue hacer a Eliseo su discípulo (ver 1 Re 19:19ss). Esto llevó a Jazael y a Jehú a ser ungidos (ver 1 Re 19:15-16), quienes finalmente derribaron el malvado reino de Ajab y Jezabel.

Es posible que haya sido difícil para Elías pensar en el discipulado, porque creía: "Como profeta del Señor, he quedado yo solo" (1 Re 18:22) entre personas ambivalentes acerca de su compromiso con el Señor (ver 1 Re 18:21). Elías pudo haber pensado que no había nadie dispuesto a ser su discípulo. Sin embargo, en realidad, habían siete mil hombres en Israel que estaban comprometidos con el Señor y opuestos a la adoración de ídolos de Baal (1 Re 19:18). Aun así, el Señor tuvo que susurrar en el oído de Elías antes de que pensara en el discipulado.

Jesús ya susurró en nuestros oídos antes de Su Ascensión. Él nos mandó hacer discípulos de todas las naciones (Mt 28:19). Esto bien puede ser lo mejor que haremos en toda nuestra vida para construir el reino del Señor.

Oración:  Padre, envía al Espíritu Santo para que haga tantos discípulos como sea posible, que harán tantos discípulos como sea posible.

Promesa:  "Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos han ofendido" (Mt 6:11-12).

Alabanza:  San Luis murió a los veinticuatro años ministrando a los enfermos, sirviendo con gozo a las víctimas de una severa plaga. Él escribió: "Dios en Su gracia y Su amor me está mostrando el camino de la verdadera felicidad".

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 28 de diciembre de 2017.

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